Un día, todo esto habrá terminado.
No habrá una papelera en la esquina para los pañales sucios. No habrá un dolor de cabeza de no dormir lo suficiente. No habrá goteo nasal para acabar, o juguetes al azar para limpiar, o pequeñas manos que necesitamos para alcanzar abajo y mantenga mientras cruzamos el estacionamiento ocupado.
Habrá sólo nos ser.
No vamos a ser los mismos que éramos antes de los niños, tampoco.
No vamos a ser ingenuamente despreocupada o suelto con nuestro optimismo. Tener hijos nos ha cambiado, en nuestro fuero interno, incluso si somos predominantemente siguen las mismas personas que se reunieron y se enamoraron cuando eran adolescentes de 14 y 15 años de edad.
Mi amor por ti es más profunda. (Cheesy pero cierto). Mi amor por ti se ha asentado en algo que voy a admitir tristemente vez en cuando me tomo por sentado. Trato de que no. (Pero yo sé lo que hago.)
Hubo momentos en que hemos luchado o llevamos a cabo nuestra ira sobre la otra (no muchos de su parte, sobre todo en la mía - el fuego). Hubo casos en los que nos sentimos como nos fue contra el mundo, y nos sentimos el peso de la misma sobre nuestros hombros demasiado estrechos. Hubo muchas veces cuando nos abrazamos en la noche, después de que los niños habían ido a la cama, y la dificultad de la vida habían adelgazado desde menos de una ola del mar que todo lo consume y en más de un ligero murmullo en la playa; queremos abrazar y recordamos unos a otros que nuestro amor sólo ha crecido a través de todo, y que somos más fuertes a través de estos desafíos.
Siempre nos lo hacen a través, porque queremos. Sin embargo, algunos de los retos de la vida no son evitables. Usted nunca ha sido uno de esos desafíos, para mí.
Siempre has sido la persona que conozco me sostendrá cuando lloro, me abrace cuando sería más fácil de empujar lejos, para decirme que todo va a estar bien, y no porque sea falsamente me consuela que decir esto, pero porque usted estará allí para sostener mi mano a través de cualquier cosa, y en que no es la comodidad suficiente.
Te levantas a mí cuando te necesito para. (He dicho siempre que un individuo fuerte necesita un socio fuerte y constante, no una innecesaria "sí".) Usted me dice avanzar desde una emoción rancio He estado revolcándose en un día muy largo, y para obtener y mover mi cuerpo cuando fácilmente podría haber quedado en la cama y tiró de las mantas sobre mi cabeza en su lugar. Y entonces, cada noche, no importa lo que nuestro día ha sido así - independientemente de los estados de ánimo y el trabajo y las luchas de crianza - te abrazo y y bésame y dime buenas noches.
Necesitamos apreciar los nos dormimos y despertamos a. Tenemos que recordar que otras personas tienen la capacidad de hacer daño a nuestros sentimientos o crear desarmonía temporal en nuestras vidas, pero, más, tenemos que reconocer la permanencia de lo que hemos creado, juntos.
Usted es la persona me río con la mayoría. Usted es la persona que "entiende" mí. Usted es la persona que me conozca mejor, que mi tonta y aventuras más maravillosas se han compartido con, y usted es el que yo quiero a mi lado para todo lo que sé es por delante.
Aunque no voy a pretender saber lo que hay más allá de toda la vida, lo sé a ciencia cierta que me renueven a usted cada día - y volver a comprometerse con nosotros.
Yo os elegí a los 14 cuando te conocí. Yo os elegí a 25 cuando me casé contigo. Te elijo una y otra vez.
Esto significa comunicar cuando yo preferiría no hablar. Esto significa que usted y perdonando a mí mismo y no refrito problemas de ayer. Significa besando y haciendo tiempo para estar juntos, sobre todo cuando está cansado y el día era largo. Esto significa prestar atención a todas estas cosas maravillosas que compartimos en lugar de insistir en nuestros defectos. Significa que conscientemente reconozco que yo elijo a ti, y que tú me elijo también.
La vida es a menudo incierto, injusta e impredecible, pero esto no es: que yo elijo.
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